lunes, 2 de julio de 2007

Diamante de Sangre:

Solomon Vandy tiene un hijo que manda a la escuela cada mañana mientras sale a pescar. Un hijo que le habla de esa Sierra Leona posible, de un país de utopías, un paraíso que llegará cuando termine el espanto. Mientras tanto viven en una guerra civil financiada por el contrabando de diamantes. Solomon es separado de su familia y llevado a trabajar en una mina y su hijo es reclutado como soldado del Frente de Unidad Revolucionaria. Solomon encuentra y entierra un diamante rosa gigante antes de ir a prisión y es así como conoce a Archer, un mercenario de Zimbawe decidido a encontrar la piedra como salvoconducto de un continente para él, maldito.

Juntos emprenden un viaje en busca de lo valioso para cada uno: Para el mercenario, el diamante es valioso porque supone es la garantía de libertad y descanso del infierno que le ha tocado vivir. Para el pescador, lo valioso, el verdadero diamante es su hijo, por el que está dispuesto a arriesgarlo todo.

Esta película muestra el extremo de la maldad humana que es hacerle daño físico o psicológico a un niño pero lo extraordinario es que denuncia a los verdaderos villanos que mueven los hilos que afectan las vidas de tanta gente para bien o para mal: los poderes políticos o económicos que por acumular diamantes en una bóveda o por fomentar divisiones y violencia que les permite mayor impunidad son capaces de crear infiernos de guerra en poblaciones vulnerables a ella por su miseria, su ignorancia y su desesperación.

Por eso, rescato el personaje de Benjamín, muy breve pero muy hermoso, interpretado por Basil Wallace. En medio del caos, del odio y la lucha por la supervivencia aparece esta figura de una bondad infinita y sin aspavientos, que parece tener lentes mágicos que lo hace ver mas allá de las historias que a cada quien le ha tocado vivir y sus consecuencias, y entiende que en esencia todos buscamos, necesitamos, tememos y amamos lo mismo, a pesar de lo aprendido, lo sufrido, lo vivido. Por eso tiene esta conversación con Archer:

Archer:
-"Usted cree que porque tiene buenas intenciones lo dejaran vivir, ¿eh?"
Benjamín:
-"Mi corazón siempre me dijo que la gente es intrínsecamente buena. Mi experiencia indica lo contrario. Pero ¿y usted, señor Archer? En su larga carrera como periodista, ¿diría que la gente es en su mayoría buena?
Archer:
-"No. Diría que es simplemente gente".
Benjamín:
-"Exactamente. Son sus acciones lo que los hace buenos o malos. Un momento de amor aun para un hombre malo puede darle sentido a una vida. Ninguno de nosotros sabe qué camino nos llevará a Dios. "

Benjamín me deja el mensaje hermoso que lo que nos interconecta y nos une es mucho mas grande y profundo que todas las diferencias y categorías que hagamos entre nosotros. Esto no significa que no hay diferencias fundamentales entre la gente pero no son las finales, no están en nuestra esencia.
Nos empeñamos en las dualidades: sobre todo cuando vemos casos extremos de maldad o bondad, pero "todos llevamos todo dentro" y lo que somos es simplemente una elección diaria, mas allá de nuestra historia y aprendizaje, de nuestros actos y creencias, todo ser humano mientras esté vivo puede cambiar para mejor o para peor.

6 comentarios:

Guachafitera dijo...

Ishmael Beah, cuenta su viaje en el terror de la guerra como niño soldado durante la Sierra Leona de sangre y llanto en un libro maravilloso pero duro. Aquí te lo dejo...

A LONG WAY GONE: Memoirs of a Boy Soldier
http://www.alongwaygone.com/long_way_gone.html

Me quedo sin palabras ante la sordidez de la violencia...

Un abrazo

Unknown dijo...

Me llevaste de Sartre, los existencialistas, pasando por mis clases de teatro hasta una madeja despareja de cosas que pienso.

Este post es buenísimo, aúna tus dos blogs, tu modo de decir en ambos que nunca fue tan uno solo como en este.

Con todo lo triste y todo lo real y por supuesto todo lo que deja pensar. De lujo.


Cuánto me alegro de que estés aquí nuenamente pera darnos tanto.


Un fuerte abrazo.

Maria Ines dijo...

Querida Azul:
Esta película de gran contenido visual y testimonial me impactó fuertemente.
De alguna forma el director ha querido extremar las diferencias y las coincidencias desde un plano general.
En síntesis podríamos livianamente decir:
Para dar lujo y ostentación al 10% del planeta el 90% restante debe excluirse, muchos a las posibilidades mínimas...
No creo en la radicalización del pensamiento y diría mejor:
Para que el 10% del planeta disfrute del lujo hay un 30% que muere de necesidades básicas y un 60% restante apoya con la indiferencia.
Conclusión:
La naturaleza humana no es ni buena ni mala, simplemente es.
De acuerdo a las condiciones, se desarrolla más cerca del bien o del mal.
Alguien dijo algo que con otras palabras más o menos sentenció:
El problema no es la gente mala.
El verdadero problema es que las personas buenas no hagan nada.
Interesante planteamiento Azul, nos estás dando hilo para pensar.
Un beso
María Inés

Alyxandria Faderland dijo...

Y que tal el descanso? por lo que veo, siemrpe en linea sinusoidal entre los arcos iris y las sombras de la vida, como la vida misma.
Esperemos que hayas disfrutado de este parentesis.

Lucía dijo...

Tienes razón, todos los días nuestras acciones nos llevan por un camino o por otro. Saber lo que es verdaderamente importante y hacer lo correcto en cualquier caso es una lucha diaria.
Un abrazo.

Gloria dijo...

Guachafitera, gracias. Voy a buscarlo, yo tambien quedo mal y muda con lo que un ninho puede llegar a vivir en este mundo. Un abrazo.

Maximo, los existencialistas y su responsabilidad por la vida me resuenan mucho, las clases de teatro vienen al caso supongo que porque todos llevamos todo dentro y al actor solo le hace falta conectarlo. Gracias por leer el otro blog y por tu tambien dejarme tanto. Un fuerte abrazo.

Maria Ines, me gustan tus reflexiones, es importante resaltar la indiferencia como participante en la creacion de infiernos como lo has hecho. Muchas gracias por tus palabras y tu linda visita. Un beso.

Lady, asi es, lineas sinuosas entre la luz y la sombra, he disfrutado y aprovechado mucho el parentesis. Gracias y un beso.

Lucia, totalmente de acuerdo, la vida asi, parece ser una constante decision o eleccion. Un abrazo.